UniversidaddeCádiz

La Unidad de Cultura Científica y de la Innovación de la UCA trabaja diariamente por mostrar a la sociedad todo el trabajo de investigación que desarrolla la Universidad

Esta semana, con la solemne apertura del curso académico, toda la Universidad de Cádiz ha sido el centro de las miradas y las noticias. Pero en la noche de este viernes, si hubiera que señalar a algún protagonista ése sería sin duda la Unidad de Cultura Científica y de la Innovación de la Universidad de Cádiz. Este servicio está detrás de la organización de La Noche Europea de l@s Investigador@s, el gran acto de divulgación que la UCA celebra cada año. La unidad está formada actualmente por cuatro personas: Paula Cantero, Blanca Román, Gonzalo Vadillo y Pablo Donato Pablos, que analizan, horas antes del inicio de la gran cita en San Fernando, la relevancia de la labor de divulgación científica. 

La Unidad está compuesta por cuatro miembros. ¿De qué se ocupa cada uno para que la unidad funcione a pleno rendimiento?

Blanca Román: Pese a que todos tratamos de ayudarnos, cada uno tiene un papel definido. Paula Cantero es la que se encarga de lo que nosotros denominamos actividades de divulgación científica, de coordinarlas, de hablar con los proveedores, de hacer todas las gestiones de producción. Gonzalo Vadillo está al frente del material audiovisual que genera la unidad, del diseño y del trabajo de inventiva que requiere una unidad tan sujeta a la creatividad. Pablo Donato Pablos controla las redes sociales, el diseño y también aporta frescura al equipo, es el más joven y eso se nota. Y yo me estoy encargando de la coordinación de la unidad, de la elaboración de los planes y de la comunicación externa: notas de prensa, difusión, relación con los medios de comunicación. Y luego la labor de realización de informes internos, justificación de los proyectos, evaluación junto con el resto del equipo y la coordinación con las líneas de actuación del equipo rectoral.

En los últimos años, la Unidad de Cultura Científica y de la Innovación ha ido ganando presencia tanto dentro de la Universidad como fuera. Pero, ¿cómo definirían la UCC+i y cuál es su misión principal dentro y fuera de la UCA?

Paula Cantero: La Unidad de Cultura Científica tiene la misión de hacer llegar a la sociedad, especialmente al entorno de la provincia de Cádiz, toda la investigación que se genera en nuestra universidad. Investigación en todos los ámbitos, tanto de las ciencias en su acepción tradicional como de las ciencias sociales, el Derecho y las Humanidades; o sea, todo lo que se hace en los laboratorios y todo lo que se investiga también en los despachos. Nosotros intentamos dar a conocer a la sociedad de una forma amena, divertida y un tanto diferente la producción científica de la UCA. Para ello nosotros tenemos diferentes líneas de actuación. Por un lado, hacemos actividades de divulgación científica como La Noche Europea de l@s Investigador@s, los Cafés con ciencia, exposiciones… Y actividades de toda índole, incluso también espectáculos científicos.

Pablo D. Pablos: Nuestra actividad se basa en aquello que haga que la sociedad entienda de una forma diferente y, nada aburrida, qué es lo que se hace en los laboratorios y en los despachos de nuestra universidad. Buscamos transmitir cómo la investigación mejora la calidad de vida de todos nosotros y que todo lo que se hace en la universidad de una forma directa o indirecta afecta nuestro desarrollo del día a día. Porque desde darle a un interruptor y encender la luz hasta ir al médico a que te recete una determinada pastilla para el colesterol tiene  una relación directa con la ciencia y con la investigación. Nos dedicamos a hacer entender a la sociedad, la importancia que tiene la ciencia, la importancia que tiene la investigación.

Gonzalo Vadillo: Además de mostrar los avances en la investigación, tratamos de humanizar la figura del investigador, que no es una persona que vive en un laboratorio, sino que es un ciudadano normal y corriente, cuya vocación está en la investigación y que trabaja para hacer vivir mejor a los demás. Eso es lo que intentamos hacer también. Gran parte de nuestros esfuerzos se orientan en incentivar las vocaciones científicas, que los niños entiendan que las matemáticas pueden ser divertidas, que la química puede ser muy bonita o que la física es apasionante. Quizá todo esto sirva para que quien asista a una de estas actividades quiera ser científico el día de mañana.

Blanca Román: Y en cuanto a definir la UCC+i, pues no sé, es un grupo de cuatro profesionales de la comunicación, locamente enamorados de su profesión, que intentan ayudar a los demás a entender un poco más el mundo que nos rodea.

Este viernes, la unidad celebra uno de sus grandes eventos anuales, La Noche Europea de l@s Investigador@s, con el estreno de San Fernando como sede. ¿Qué supone para la UCA y para la provincia este cambio de sede y cómo esperan que impacte en la ciudadanía?

Blanca Román: Este año lo que ha pasado es que no hemos conseguido financiación de la Comisión Europea para la actividad. Nos han aprobado el proyecto, pero sin financiación. Entonces, teníamos cierta potestad para poder decidir en qué ciudad hacerlo de la provincia. Generalmente siempre hemos pivotado entre Jerez y Cádiz porque son dos de las ciudades más importantes de la provincia. Y este año vimos la oportunidad de hacerlo en San Fernando, que está acogiendo muchos proyectos de la universidad. El Consistorio quería implicarse verdaderamente en la celebración de La Noche Europea de l@s Investigador@s y, de hecho, este año una de las novedades es que, por primera vez, el ayuntamiento viene como coorganizador. Ellos se han implicado económicamente de una forma notable y también nos han dado un gran respaldo con la difusión. El ayuntamiento ha hecho suya la iniciativa y ha sido espectacular la respuesta que han tenido y la disposición absoluta por parte de todo el equipo político del ayuntamiento y de sus técnicos. También nos han ayudado en cuestiones técnicas, como la instalación de toda la infraestructura, la colocación de vallas y baños, con la instalación eléctrica. La verdad es que el ayuntamiento de San Fernando ha puesto toda la carne en el asador para que viniéramos aquí y que fuera un éxito. Y nosotros no podemos estar más agradecidos.

Paula Cantero:  Ya veremos el año que viene qué ocurre, si tenemos financiación o no, si volvemos a Cádiz, a Jerez, a San Fernando… Es una decisión que tendremos que tomar llegado el momento. Este año ha influido también que muchos investigadores nos reclamaban el hacer una acción de estas características en San Fernando y, honestamente, pensamos que ha sido un acierto.

Coordinan un evento que reúne a más de 550 investigadores e investigadoras. ¿Cómo se organiza una cita de estas dimensiones y qué retos logísticos y científicos conlleva? ¿Qué papel juega la colaboración con instituciones y entidades en este proceso?

Paula Cantero: La organización es una locura. Imagínate lo que es coordinar a más de 500 investigadores que van a formar parte o van a ser los anfitriones de 72 talleres, ocho microencuentros y las 11 acciones previas en centros escolares, que se hacen como pre-eventos para calentar motores. Esto es una auténtica locura.

Blanca Román: Es una locura que coordina a la perfección Paula Cantero, que es una hacha en esto. Ella es principalmente el alma en estos últimos años de La Noche Europea de l@s Investigador@s. Aquí todos trabajamos, pero es ella la que ejerce la coordinación de forma maravillosamente ordenada y los demás bailamos un poco al son de ella. Esto lo que requiere es eso, directrices claras. La experiencia es fundamental y nosotros llevamos 13 años montando La Noche Europea de l@s Investigador@s, 14 ya con este. Vamos aprendiendo de los errores anteriores, ya sabemos perfectamente, pues, las cosas que son prescindibles, las que no lo son… Nosotros a simple vista sabemos perfectamente lo que entra en una carpa, lo que no entra, la distribución que hay que hacer, el sistema eléctrico cómo debe ser… ¡Hasta el ritmo de baile para amenizar! Por no hablar de los permisos que hay que solicitar y toda la burocracia que, lógicamente, hay que cumplimentar. Y sin olvidarnos, claro está, de la previsión de las tallas de camisetas que vamos a distribuir (ríe).

Paula Cantero: Yo recuerdo la primera noche de los investigadores. El día antes del montaje ya no podíamos ni hablar de lo cansados que estábamos porque hacíamos demasiadas cosas que ya hemos optimizado. Ahora, hemos sistematizado más los trabajos y algunos los hemos externalizado. Sin duda, la experiencia es un grado.

¿Qué estrategias emplean para lograr que los talleres y microencuentros resulten atractivos y comprensibles para públicos de todas las edades? ¿Los investigadores les piden mucho apoyo a la hora de realizar sus actividades?

Blanca Román: ¿Qué garantiza que un taller sea atractivo? Eso es muy complicado. Nosotros, con el paso de los años hemos desarrollado cierta intuición de lo que puede pasar. Cuando ves un título, ya sabes más o menos de qué va el tema. Nosotros le pedimos a los investigadores que nos rellenen una ficha y ahí ya adelantan el contenido de las acciones. Y es cierto que los investigadores, cuando nos mandan una actividad de estas características, ya vienen con la lección aprendida. Ellos saben perfectamente que tienen que preparar una actividad que vaya dirigida a todos los públicos, especialmente a niños, porque esto es un evento de carácter familiar.

Paula Cantero: Nosotros por supuesto, miramos las propuestas y cuando hay algo que hay que modificar hablamos con ellos para tratar de adecuar el taller al público que se van a encontrar, decirles “mira, este formato no encaja aquí”, porque puede que haya  contenido que creamos que no sea apto para todos los niños o con un vocabulario demasiado técnico. Nosotros lo que intentamos es darle asesoría en base a la experiencia que tenemos. Pero lo cierto es que en contadas ocasiones nos hemos visto en la necesidad de reconducir una actividad. Generalmente, los investigadores ya en la universidad tienen un gran bagaje divulgativo y saben cómo transmitir sus mensajes de la mejor manera. Además una persona que viene a participar en La Noche Europea de l@s Investigador@s tiene una mentalidad muy abierta, y por consiguiente que sabe a lo que viene y lo que tiene que transmitir.

Gonzalo Vadillo: Que un taller tenga más éxito que otro es muy variable, tanto como los gustos de las personas. Hay veces que nosotros creemos que un taller no va a tener mucha repercusión, porque creemos que a lo mejor el tema es un poco más farragoso, y resulta que al final es el que más gusta, porque es donde el público ha descubierto más cosas o se ha sentido más a gusto, y en eso es fundamental el entorno que te rodea. Hay espacios como en Jerez, que el tema de la viticultura, el vino, la alimentación, funciona súper bien, y en otras áreas como puede ser en Cádiz, pues funcionan muy bien los temas relacionados con el mar.

Pablo D. Pablos: Si es por temas, en general todo funciona bien. Especialmente los temas de salud y de patrimonio: nosotros tenemos un equipo de arqueólogos en general que trabaja de maravilla. Aquí vienen tres o cuatro grupos  los investigadores explican lo que están haciendo y la gente flipa.

Además de la divulgación, La Noche de l@s investigador@s también visibiliza el trabajo de los institutos y grupos de investigación de la UCA. ¿Qué beneficios tiene esta proyección para la propia universidad y para la transferencia de conocimiento en la provincia?

Blanca Román: El difundir la investigación que se hace en la universidad, el dar a conocer un proyecto ya sea europeo, nacional, autonómico o incluso del plan propio, lo que hace es dar visibilidad a la universidad en todos los ámbitos de nuestra vida. Es muy importante que la gente sepa lo que se está haciendo en la universidad, es un ejercicio de transparencia puro y duro. La gente paga unos impuestos y quiere saber esa parte de esos impuestos, ese dinero que se mete en la universidad, a qué se destina. Y no solo se destina a formar el futuro de nuestro país y a la docencia, sino que también se está destinando a hacer investigación de calidad. Porque lo que sí tenemos que tener claro es que el sistema público de universidades es el que sostiene el sistema de investigación de este país. Y la inversión en las universidades públicas es fundamental. Y en lo que respecta a la Universidad de Cádiz, que es lo que nosotros conocemos, es un dinero que merece la pena. Porque la Universidad de Cádiz es una universidad de primera división.

Paula Cantero: No olvidemos que nuestros investigadores están muy bien situados en los rankings. En oceanografía, por ejemplo, la Universidad de Cádiz es una de las más prestigiosas del mundo. Nosotros tenemos investigadores muy buenos, de los que tenemos que sentirnos muy orgullosos y nuestra misión es dar a conocer eso a la sociedad, que la sociedad tenga referentes en la Universidad de Cádiz. Porque es muy importante que, igual que se tienen referentes en otros ámbitos, en el de la cultura, en el del deporte, tengamos referentes en la cultura científica, en la investigación, en la ciencia.

Blanca Román: Y, sobre todo, que también visibilicemos el papel de las mujeres en estos ámbitos. Las mujeres son pieza clave y fundamental. Cada vez hay más investigadoras. Es cierto que solo un 26% de los catedráticos actuales de la universidad son mujeres. Pero cada vez son más, poquito a poco.

Gonzalo Vadillo: ¿Y cómo se beneficia el investigador y la universidad de este proceso? Pues, si tú das a conocer un proyecto, es más posible que eso cale en la sociedad, lo que aumenta las posibilidades de obtener financiación. Porque, tras un trabajo de divulgación puede que responsables de algunas administraciones vean que a esa investigación le puede venir bien y decidan invertir en ese proyecto. O puede que empresas privadas se den cuenta que la universidad tiene una patente que le puede resultar interesante y busquen fórmulas de colaboración.

Más allá de la gran cita de este viernes, ¿qué otras actividades relacionadas con la divulgación desarrolla la UCC+i?

Blanca Román: Todos los años tenemos un plan de divulgación de la ciencia que nos lo cofinancia la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades. Es decir, nosotros todos los años tenemos una hoja de ruta planificada, sabemos con antelación las actividades que vamos a ir haciendo. Este año tenemos 14 o 15 actividades que se van a desarrollar, que son actividades, muchas de ellas propuestas por los investigadores de nuestra casa. Nosotros, cuando elaboramos el plan de divulgación, emitimos un comunicado a la comunidad universitaria, ellos nos proponen acciones. Éstas se evalúan, se llevan a la comisión de investigación y se determina qué acciones se van a introducir siguiendo la filosofía de nuestro plan de divulgación. Y comenzamos el proceso para tratar de obtener financiación del FECYT. Esta antelación nos permite tener planificado el trabajo, saber qué acciones vamos a desarrollar. Por ejemplo, ahora mismo estamos sumergidos en la puesta en marcha de diversas exposiciones de carácter divulgativo y tenemos acciones también para redes sociales específicas porque estamos innovando mucho en este aspecto gracias a que tenemos a Pablo y a Gonzalo.

Pablo D. Pablos:  Estamos trabajando mucho el formato audiovisual, creo que tenemos un formato audiovisual ahora de primera categoría con el que estamos intentando llegar a públicos emergentes, a jóvenes, a las nuevas generaciones, a través de TikTok, Instagram. Además, estamos desarrollando actividades en paralelo, como unas jornadas de puertas abiertas en el mes de noviembre, un acto que se anunciará en su momento. También estamos pensando en nuestro tradicional Café con ciencia y participamos también de forma activa en seminarios y foros especializados en divulgación científica. Nosotros no paramos, salimos de un proyecto y nos metemos en otro.

Blanca Román: Nosotros tenemos una ayuda del plan propio con la que ayudar a poner en marcha las iniciativas de los investigadores. En fin, tenemos muchísimas acciones que ya se están poniendo en marcha, sea en el exterior, como La noche de los investigadores, o en los propios centros. A veces hay pequeños atascos porque claro, son tantas cosas teniendo en cuenta que la Universidad de Cádiz tiene 2.200 investigadores. Y no solo ponemos en marcha actuaciones de estas características, sino que tenemos que atender sus necesidades comunicativas y la verdad es que es muy complicado, porque hay que tener un equilibrio entre áreas, hay que intentar que todo el mundo esté atendido.

En un contexto como el actual, en el que circula tanta desinformación y desconfianza hacia la ciencia, ¿cómo afronta la UCC+i el reto de exponer la evidencia académica?

Gonzalo Vadillo: Las fake news y la desinformación es algo que nos preocupa mucho no sólo a la UCC de la Universidad de Cádiz, sino a todas las UCC. Es algo que nosotros, cada vez que tenemos encuentros anuales, siempre sale. Y siempre sale porque nos estamos encontrando con la era de las nuevas tecnologías digitales y de TikTok, es la era de la desinformación absoluta. ¿Cómo intentamos atajarlo? Educando, estando a disposición de los medios de comunicación siempre que ellos lo necesiten para que puedan contrastar toda la información, ayudando a los compañeros de los medios de comunicación a eso, a que tengan a mano a un verdadero profesional o a un verdadero experto de una determinada materia. Tratamos de luchar contra esta tendencia a la desinformación participando activamente en foros y en acciones que vayan en contra de este fenómeno, apoyando enérgicamente a nuestros investigadores para que puedan contar verdaderamente la ciencia de una forma transparente, clara y de forma objetiva.

Blanca Román: Nosotros tenemos prevista una exposición que la capitanea una investigadora del Departamento de Publicidad y Marketing de nuestra universidad, que es experta en la materia y que está enfocada en las fake news. Estamos  prestando una especial atención al fenómeno, mirando lo que se publica en redes para poder, en un momento determinado, publicar una información que sí sea veraz.

Parte de la labor de divulgación de la UCC+i se realiza en entornos singulares, como playas, salinas o yacimientos históricos. ¿Es importante que la ciencia sea visualmente atractiva para que los ciudadanos se acerquen a ella?

Paula Cantero: Una de las características que tienen las Unidades de Cultura Científica es que nosotros hacemos acciones para visibilizar la ciencia y la investigación a la sociedad, pero siempre con formato innovador. Pretendemos llegar al mayor número de personas posibles y ahí el cuidado de los formatos es imprescindible. Intentamos sacar a la universidad de sus espacios, intentamos llegar a los espacios públicos, plazas, mercados de abasto, bares, calles de todo tipo, plazoletas donde los niños juegan habitualmente, una salina, las playas… todo esto son escenarios estupendos para divulgar ciencia, porque además son escenarios que la gente tiene en su día a día, y nosotros lo que hacemos es que le llevamos la ciencia a sus vidas. Esa forma de externalizar, de demostrar la investigación fuera de nuestros espacios académicos habituales es una forma también de hacerlo todo mucho más cercano, que la comunicación sea mucho más fluida y también que le llegue a gente que normalmente queda fuera del circuito universitario. Ahora, por ejemplo, hemos puesto desde la Dirección de Comunicación Estratégica unas pantallas en la calle Ancha y en la Facultad de Enfermería y Fisioterapia, que suponen un formato innovador, porque ahí estamos contando aspectos destacados de la actividad universitaria, investigaciones que se están haciendo, datos como que la universidad dispone de una cartera de patentes de 200 invenciones que se pueden licenciar para que sean transferidas a otras empresas.

Gonzalo Vadillo: Además, la sociedad en la que vivimos pide más espectacularidad en las cosas, que nos adaptemos al lenguaje de nuestras nuevas generaciones. No podemos divulgar con formatos de hace 30 años, tenemos que renovarnos o morir y para llegar pues tenemos que estar al día en el lenguaje que se utiliza, en el impacto visual y en ofrecer propuestas que llamen la atención. Por ejemplo, La Noche Europea de l@s Investigador@s es un formato que lleva 14 años funcionando súper bien, si eso funciona lo seguimos haciendo. Pero lo que no funciona, lo desechamos y buscamos otros formatos.

En los últimos años se ha percibido una mayor apertura de los investigadores UCA a los medios de comunicación y a las redes sociales, ¿hasta qué punto consideran que ha influido la labor de la Unidad?

Gonzalo Vadillo: Es una pregunta difícil, nosotros no deberíamos ser los que nos evaluáramos. Nosotros también hemos notado ese incremento en la implicación de los investigadores y trabajamos para concienciar de que la divulgación es necesaria. La culminación de una investigación no es la publicación en revistas especializadas o la asistencia a congresos, el siguiente paso es contar a la sociedad lo que se ha conseguido y esa última fase es la divulgación. Eso cuesta aún por parte de algunos investigadores.

Paula Cantero: Pero no cuesta porque no crean que es una tarea importante, sino por la carga de trabajo que acumulan. Los investigadores son también docentes y tienen que preparar clases o coordinar máster, entre otras funciones. Pero insistimos en que tanto los investigadores como la Universidad y las propias administraciones saben que la divulgación es una fase fundamental del proceso de investigación.

Blanca Román: ¿Qué papel ha desempeñado la UCC+i en todo este proceso? Me gustaría creer que hemos puesto nuestro granito de arena, aunque queda mucho por hacer, sin duda. En la Universidad de Cádiz tenemos 2.200 investigadores y, que hagan divulgación, unos 800. Hay un abanico importante de personas que tenemos que convencer. Estamos aquí para asesorarlos, para hacer una divulgación de calidad, porque la ciencia siempre tiene que ser de calidad.

Pablo D. Pablos: Yo quiero creer que sí hemos contribuido a esa mayor apuesta por la divulgación, que la mayoría de investigadores saben que la UCC+i existe y que intentamos ayudarlos en todo. Que saben que somos unos enamorados de nuestra profesión y que estamos a su entera disposición.