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María Teresa Gutiérrez Amares, Ángela Hens y Rocío Toro son las nuevas responsables de Materno-Infantil y Radiología; Anatomía Patológica, Historia de la Ciencia, Medicina Legal y Forense y Toxicología; y Medicina y Cirugía

El pasado mes de septiembre, tres departamentos de la Facultad de Medicina de la Universidad de Cádiz celebraron elecciones para renovar su dirección. El nuevo curso se estrenaba con cambios en la dirección de Materno-Infantil y Radiología; Anatomía Patológica, Historia de la Ciencia, Medicina Legal y Forense y Toxicología; y Medicina y Cirugía. Al frente se situaban tres médicas e investigadoras de la Universidad de Cádiz: María Teresa Gutiérrez Amares, Ángela Mercedes Hens Pérez y Rocío Toro Cebada, que sustituían, respectivamente, a Gonzalo Gutiérrez Amares, Santiago Gómez Salvador y Alipio Mangas. El pasado miércoles 8 de octubre tomaban posesión de manera oficial de sus nuevos cargos junto con el nuevo director del Departamento de Filología Francesa e Inglesa, José María Mariscal.

Teresa Gutiérrez estará al frente de Materno-Infantil y Radiología. La investigadora, nacida en Jerez, es profesora titular de Universidad en el área de Radiología y Medicina Física del Departamento Materno-Infantil y Radiología de la UCA, vinculada al Hospital Universitario Puerta del Mar. Licenciada y doctora en Medicina y Cirugía por la UCA, es especialista en Medicina Nuclear y cuenta con diversas acreditaciones en instalaciones radiactivas y radiodiagnóstico. Ha desempeñado numerosos cargos de representación y gestión en la Universidad de Cádiz, entre ellos, secretaria de departamento, asesora para Ciencias de la Salud y delegada en el Hospital de Jerez, además de ser miembro electo de la Junta de Centro y del Claustro Universitario en distintas etapas.

Ángela Mercedes Hens, la nueva directora del Departamento de Anatomía Patológica, Historia de la Ciencia, Medicina Legal y Forense y Toxicología, se doctoró en 1991 por la Universidad de Córdoba con la tesis Glomerulonefritis experimental por adriamicina. Aspectos morfológicos y funcionales que determinan la evolución. Se formó en la especialidad de Anatomía Patológica en el Hospital La Paz de Madrid y comenzó a trabajar como especialista en el Hospital de Jerez. Posteriormente, en el Hospital Puerto Real, compaginó su actividad asistencial con la docencia, inicialmente como Profesora Asociada y desde el año 2001 como Profesora Titular con plaza Vinculada.

Por último, Rocío Toro está al frente de Medicina y Cirugía. Doctora desde 2004 por la Universidad de Sevilla con la tesis Transposición de grandes arterias. Corrección anatómica, es especialista en cardiología y máster en Diagnóstico a través de técnicas de imagen cardiovascular. La investigadora cuenta con más de 100 artículos publicados en revistas de investigación, en su mayoría de cuartil Q1, y destaca por su participación en congresos médicos nacionales e internacionales. Con más de tres trienios acreditados, la doctora Toro es desde 2022 de Profesora Titular de la Universidad de Cádiz. En marzo de 2025, asumió su puesto como catedrática de universidad.

Horas antes de que firmaran sus nuevos cargos, hablamos con ellas para que nos contaran los retos que asumen en la dirección de sus departamentos y sus impresiones sobre el área biosanitaria de la Universidad de Cádiz.

¿Qué significa para usted asumir la dirección de su departamento de la Facultad de Medicina?

Teresa Gutiérrez (T.G.) Asumir la dirección del departamento Materno-Infantil y Radiología supone una gran responsabilidad y un gran reto. Para mí, los retos son bienvenidos y me gusta afrontarlos con decisión y afronto, como no podía ser de otra manera, este nuevo reto con gran ilusión. Trabajaré con tesón en esta nueva etapa, para que nuestro departamento siga avanzando. Para ello, pondré toda la dedicación y capacidad con la que cuento al servicio del departamento. En este sentido, y con la ayuda, y colaboración, de los miembros del departamento, esperamos seguir consiguiendo nuevos logros, y seguir creciendo como departamento Materno-Infantil y Radiología. Intentaremos continuar, como ya se venía realizando hasta ahora, haciendo las cosas bien y seguir una política en la que se implemente la cultura de la mejora continua.

Ángela Hens (A. H.) Significa una responsabilidad que asumo con gran ilusión, no sin cierto nerviosismo. Pero el equipo de trabajo, las personas ligadas al Departamento y las que representan la propia institución, me dan confianza suficiente y energía para comprometerme sin dudas.

Rocío Toro (R.T.) Pues para mí supone un motivo de satisfacción al ser elegida en una convocatoria electoral por parte de todos mis compañeros, que consideran que soy una persona adecuada para gestionar esta labor.

¿Cuáles considera que son los principales retos que afronta actualmente su departamento?

T. G. La adaptación a LOSU y, sobre todo, paliar la falta de personal acreditado en nuestro departamento. En unos años, por motivos de jubilación, hemos perdido un número importante de profesores y sufriremos nuevas pérdidas en los próximos años, y es complicado, atraer a futuros nuevos profesionales, cuando encuentran salidas más fáciles y mejor remuneradas fuera del ámbito universitario, más aún, siendo tan complejo el sistema de acreditación para los profesionales de Ciencias de la Salud, donde no se tiene en cuenta, la labor asistencial, el número de pacientes que son atendidos por estos profesores universitarios, ni la presión asistencial que tienen.

A. H. Todos los desafíos a los que se enfrenta la Universidad de Cádiz son también desafíos para el Departamento, como, por ejemplo la sostenibilidad, poder adaptarnos de forma eficiente a la asignación presupuestaria con los recursos humanos y los espacios asignados, que pueden ser bastante limitados en ocasiones, o los cambios de adscripción que afectan a áreas y departamentos con futuras incógnitas. También es un reto algo tan novedoso como saber conducirnos adecuadamente ante una IA de un potencial tan tremendo. Son tantos y tan variados que me cuesta seleccionarlos.

R.T. Me gustaría darle un abordaje integral. Por un lado, están los encargos docentes, que deben ser cubiertos de forma rigurosa. Y, por otro lado, nos gustaría impulsar la investigación. También nos marcamos la estabilización de todos los profesores del Departamento.

¿Qué líneas de investigación desarrolla actualmente su departamento y cuáles desea potenciar?

T. G. En el Departamento Materno-Infantil y Radiología, se llevan a cabo líneas en diferentes ámbitos relacionados con la Obstetricia y Ginecología, Pediatría, Física Médica, Protección Radiológica, Radiodiagnóstico, Medicina Nuclear, Oncología Radioterápica y Rehabilitación y Medicina Física. Desde la dirección del Departamento, se seguirán apoyando las líneas existentes e intentaremos buscar y desarrollar otras nuevas.

A. H. Al ser un departamento con áreas de conocimiento muy diferentes, las líneas de investigación también lo son. Por ejemplo, microscopía de tejidos esqueléticos y dentales, fenotipos neoplásicos, biomecánica clínica y biomecánica médico forense orientadas al diagnóstico, prevención de lesiones y ámbito policial, historia de los recursos terapéuticos, biografías de científicos antropología de la salud y etnomedicina… También estamos centrados en la toxicología ambiental para detectar y caracterizar los efectos tóxicos de micocontaminantes, con dos proyectos recién otorgados: el europeo AQUACARE para la identificación, cuantificación y eliminación de contaminantes emergentes en cuencas hidrográficas, y el autonómico EDARs, relacionado con la toxicidad en organismos acuáticos. Desearía potenciar todos los proyectos que cada área tuviese como prioritarios. Me parecen de gran impacto y muy atractivos.

R. T. Dentro de una línea transversal que se denomina inflamación queremos considerar líneas relevantes en relación con la diabetes, con enfermedades cardiovasculares, enfermedades infecciosas, biomarcadores, VIH o medicina y deporte. Y queremos llevarlo a cabo de manera interdisciplinar en colaboración con otras áreas inter y extradepartamentales.

Desde su experiencia docente, ¿qué aspectos cree que deben reforzarse en la formación del estudiantado de Medicina?

T. G. En mi opinión, se debe seguir trabajando y mejorando la formación clínica de los estudiantes de Ciencias de la Salud. Hemos avanzado bastante, en esta línea, pero tenemos que seguir. Las prácticas clínicas constituyen, una buena oportunidad para la formación de nuestros alumnos, como profesionales sanitarios. La formación clínica les permitirá el desarrollo de conocimientos, destrezas y actitudes personales que les haga destacar en nuestro servicio a la salud individual y de la comunidad. Para ello, es, fundamental la implicación de las dos instituciones, universitaria y sanitaria, para conseguirlo. La prioridad en los centros asistenciales es el paciente, pero también la prioridad como hospital universitario, además de los pacientes son los alumnos, y queremos que obtengan la mejor formación teórico-práctica posible. Dentro de poco, nuestros alumnos, serán los futuros profesionales de los centros asistenciales. Nuestra prioridad será su aprendizaje y la mejora de la calidad docente y asistencial. Pronto estarán del otro lado y ese día queremos que todos los que participamos o somos responsables de su formación estemos razonablemente orgullosos de cómo lo hicimos. En los hospitales universitarios, el estudiante, debe ser desde el primer momento un miembro más del sistema. Además, se debe, facilitar la labor de los profesionales universitarios, vinculados a los centros sanitarios, para que puedan llevar a cabo, digna y eficazmente, sus tareas docentes, asistenciales, investigadoras y de gestión.

A. H. Me motiva mucho responder a esta pregunta, es muy interesante para mí. Los estudiantes de Medicina en la actualidad son de un perfil muy seleccionado, con un destacable nivel de conocimientos y unas actitudes que invitan a transmitirles aún más información específica. En absoluto creo que deba reforzarse la materia teórica, sino la práctica y ciertas habilidades básicamente transversales. El enfoque traslacional en la medicina, el trabajo en equipo y el pensamiento crítico son imprescindibles, no solo como conexión entre la información acumulada y el paciente, sino como puente entre la ciencia, la investigación y la clínica. También reforzaría la conexión entre áreas de conocimiento, el razonamiento clínico, la integración tecnológica y de resultados con un enfoque centrado en el paciente.

R.T. Entendemos que lo fundamental, dentro del actual sistema, es fomentar la curiosidad y la actitud proactiva en los futuros médicos. No hay que perder de vista que ellos van a ser los próximos transmisores del conocimiento.

¿Cómo valora el papel de la Universidad de Cádiz en la proyección y desarrollo de la investigación biomédica?

T. G. Considero que la UCA desempeña un papel esencial en la investigación biomédica a través de su compromiso con la innovación, la transferencia de conocimientos y la formación de profesionales cualificados. En este sentido, creo fundamental el papel del Instituto de Investigación e Innovación Biomédica, INiBICA. El INiBICA, en palabras de su director científico, el doctor Aguilar, “es un instituto de investigación biomédica orientado a la creación de estructuras que generen riqueza social. Mejora la salud humana, crea puestos de trabajo y genera conocimiento e innovación. En síntesis, genera un gran beneficio económico, profesional y social a toda la provincia”. En el momento actual, no sería posible una investigación biomédica de calidad sin la participación y el apoyo de los institutos biomédicos.

A. H. No tengo duda alguna sobre el nivel y relevancia de los profesionales de la UCA en el desarrollo de la investigación biomédica. Se generan proyectos de gran impacto, muy interesantes. A veces he pensado en cómo la idiosincrasia tan especial de la zona puede influir en el atractivo y originalidad de algunos de estos proyectos. La Universidad cuenta con equipos muy diversos de profesionales, bien formados y con grandes inquietudes, y aporta, en la medida que la situación lo permite, un soporte en recursos que, aunque desearíamos fuera mayor, permite el desarrollo de proyectos estratégicos.

R. T. Es verdad que si bien se ha ido adquiriendo fortalezas a lo largo de los últimos años, evidentemente es mejorable. Aunque, insisto, los esfuerzos que se hacen en este aspecto son mayúsculos. No es lo mismo investigar en Cádiz que hacerlo en grandes ciudades como Barcelona o Madrid

¿Cómo puede potenciarse la visibilidad del trabajo investigador dentro de la UCA y hacia la sociedad?

T. G. Es esencial la visibilidad de los trabajos de investigación, para que lleguen a otros investigadores, responsables políticos y a la sociedad, para su aplicación y mejora de la salud. Para potenciar su visibilidad, es fundamental, ayudar a la publicación de los trabajos científicos, facilitar el acceso a dichos trabajos, su difusión y comunicación, promover la realización de congresos, reuniones científicas, así como darlos a conocer en redes sociales.

A. H. Mi visión de este punto podría ser demasiado personal, incluso poco objetiva, pero es tal como lo percibo. Soy andaluza pero no gaditana, aunque mi vida está ya bien arraigada aquí desde hace más de treinta años; siempre me ha llamado la atención cómo atrapa este lugar, cómo el atractivo geográfico, la calidad de vida y la gente, limitan, en ocasiones, saltar a conocer nuevas culturas, nuevas formas de pensar, de desarrollarse. Por tanto también, en cierta forma, limitan expandir y compartir directamente el conocimiento. Por eso creo que las nuevas generaciones, sobre todo, deberían de forma activa y positiva potenciar la movilidad y el intercambio de conocimientos, el desarrollo colaborativo, impulsar la innovación potenciando la transferencia intercultural.

R. T. Yo creo que incrementando la interrelación entre grupos interdisciplinares para que la transmisión del conocimiento genere una traslación adecuada a través de los canales habituales como redes sociales, programas de divulgación, radio. Y también implicando, como se hace en otros países, al público en general en pequeños proyectos, tales como la detección de alteraciones en electrocardiogramas o con la realización de pequeños cursos de RCP al público en general. Creo que los ciudadanos estarían, en líneas generales, interesados en actividades como éstas.

¿Qué importancia tiene para usted la igualdad de género y la presencia de mujeres en puestos de responsabilidad académica e investigadora?

T. G. La considero crucial para el desarrollo y la excelencia de las instituciones educativas y sanitarias, trascendiendo la mera justicia social para convertirse en un factor de calidad y progreso científico. Es bien sabido, que a pesar de que las mujeres superamos a los hombres en número en cualquier institución, es escasa, la representación en puestos de alta responsabilidad.

A. H. Máxima. Me entristece incluso que tengamos que hablar de ello. Lo deseable sería que en pocas décadas no tuviéramos que plantearnos esta pregunta. Pero creo que tendrán que pasar aún varias generaciones para ello. Considero que tenemos que seguir esforzándonos en facilitar que la mujeres puedan alcanzar puestos de responsabilidad, no solo porque es justo, sino porque denota las barreras existentes, la falta de apoyo de la sociedad, las tareas asignadas por estereotipos que son muy limitantes, y la falta de modelos femeninos de liderazgo. Por ello, me alegro de que en esta ocasión seamos tres mujeres las que accedamos a un puesto de responsabilidad en nuestra universidad.

R. T. Tiene una importancia máxima. Actualmente, aunque se habla mucho de ello, no estamos en los niveles que serían deseables.

¿Qué papel cree que tendrá la UCA en el desarrollo y atracción de talento en Ciencias de la Salud?

T. G. En Ciencias de la Salud, es importante establecer planes propios de investigación, planes de estabilización de los investigadores postdoctorales, seguir apostando por el programa María Castellano Arroyo, el cual, tiene como objetivo facilitar el acceso a aquellos médicos residentes de áreas clínicas necesitadas de profesorado clínico, estableciendo cauces que les permita orientar su esfuerzo y dedicación hacia la acreditación docente. Es crucial, establecer planes atractivos para que nuestros egresados, una vez formados, no se vayan de la Universidad de Cádiz. En este aspecto, tenemos un pasado que revisar, un presente que descubrir y analizar y, sobre todo, un futuro para cambiar conductas y normalizar y desarrollar buenas iniciativas.

A. H. Las líneas de investigación que se desarrollan en la UCA son de un gran atractivo, muy variadas y de gran calidad. Si sumamos a ello los mismos motivos que antes he mencionado para explicar cómo nos atrapa este maravilloso entorno y su población, creo que se dan las circunstancias idóneas para atraer talento. Hay un gran potencial: su entorno, su gente, configuran un terreno muy propicio para crear y atraer talento. Es un lujo auténtico trabajar en Cádiz y ser de la Universidad de Cádiz, porque no solo hay calidad de vida, sino calidad humana y, por supuesto, calidad científica. Creo que aún es una universidad muy joven aunque sabia, potente, muy capaz y decididamente emprendedora y positiva. ¿Qué mejores valores podrían existir para ello, para atraer el talento.

R. T. Entiendo que la UCA debe de implementar un plan adecuado para generar el desarrollo progresivo, de una manera dinámica y, a través del INiBICA, de iniciativas que fomenten la atracción de talentos en Ciencias de la Salud. Hay que entender que, en este ámbito, sobre todo en casos como el de nuestro departamento, ese talento corresponde a investigadores clínicos que están preocupados fundamentalmente por el paciente. Es por eso que necesitaríamos el apoyo de investigadores de otras disciplinas, como fisiólogos, bioquímicos o biólogos que complementaran este afán investigador y suplementaran esta sobrecarga asistencial que tiene el clínico.

De izquierda a derecha, Teresa Gutiérrez, José María Mariscal, Casimiro Mantell, Rocío Toro y Ángela Hens.